El pasado viernes 24 de febrero cerca de 500 manifestantes se tomaron la Carrera Séptima en el centro de Bogotá para recordar a las personas que han sido asesinadas por la Policía Nacional. Jóvenes, organizaciones sociales, padres y madres de familia acudieron a la convocatoria.
Alrededor de las 2 de la tarde algunas personas se empezaban a acercar al punto principal de encuentro (Carrera Séptima con Avenida Jiménez). Posteriormente, un grupo de policías antimotines hicieron presencia y no se hizo esperar el rechazo de los manifestantes.
El principal convocante fue Yuri Neira, miembro del Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado (MOVICE) y padre de Nicolás Neira, joven asesinado en 2005 por sujetos pertenecientes al Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD) durante la conmemoración del día del trabajo. Neira ha emprendido la tarea de consolidar esta fecha como el “Día contra la brutalidad policial y el desmonte del ESMAD”, pues precisamente el 24 de febrero de 1999 es la fecha en la que, bajo la presidencia de Andrés Pastrana Arango y mediante resolución Número 01363 del 14 de abril del mismo año, se da creación a este grupo especial de la Dirección de Seguridad Ciudadana (DISEC) de la Policía Nacional de Colombia.
Pasadas las tres de la tarde, la multitud reunida procedió a comunicarse de un modo particular con los hombres y mujeres que hacían presencia por parte de la Policía. Con claveles negros, pegatinas en los escudos, actos artísticos, música y arengas recordaron a las personas asesinadas y dieron continuidad a las acciones de denuncia y visibilización del accionar de la institución estatal.
Discurso de Yuri Neira:
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=eOPfm0wUtYg
La Policía se ha visto envuelta en violaciones de derechos humanos, maltrato a animales, homicidios de menores y actos de brutal represión de las protestas sociales, hechos que se suman y la convierten en una de las instituciones del Estado más rechazadas por los movimientos sociales y sectores organizados. Uno de los actos más recientes es el desalojo violento por parte del ESMAD a pescadores y campesinos de El Quimbo en Huila o la incineración de un niño habitante de la calle en Bogotá, entre otros.
La marcha recorrió la Carrera Séptima desde la Calle 13 hasta la 18, lugar donde Nicolás Neira, de 15 años de edad, recibió una golpiza por la que falleció seis días después. Allí se aglomeraron las personas convocadas frente a su lápida, quienes entre cantos y pancartas, escucharon a varias personas dirigirse en torno a la violencia de Estado y su impunidad. Finalmente, el evento concluye con diversas actividades en el Parque Santander donde organizaciones sociales hicieron las respectivas reflexiones en el marco del evento para terminar con grupos musicales en vivo.
Más imagenes de la jornada por D. Fellous / Libre Arbitre
Autor: notiagen
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