Memoria Y Camino del Tejido de Comunicación

Colombia hoy 20 de julio conmemora los  doscientos años de independencia del yugo español, independencia o  libertad que sólo  se queda en los discursos, porque la  sociedad colombiana vive otra realidad aun mas irremediable, que la de  hace  518  años.

Cabe recordar que sólo cambió fue la forma de esclavitud y el castigo a los pueblos originarios que impartían los españoles. La supuesta independencia fue una manera  de adherir  a la humanidad al nuevo modelo de  sometiendo  con las políticas extrajeras de los EE.UU.

La población que vive en las diferentes regiones y departamentos de Colombia  que ha vivido  constantemente el rigor de la guerra lo puede reafirmar. Un ejemplo claro es el Norte del departamento de Cauca, donde la población es víctima de  los enfrentamientos de los actores armado legales e ilegales,  hasta el punto que  son perseguidos, señalados y asesinados quiénes denuncian los atropellos en busca de una verdadera libertad.

Otro caso evidente es hoy mismo en Santander de Quilichao Cauca, donde el Ejército, la Policía y el Esmat marchan por el parque principal celebrando la libertad se que dio hace doscientos años, pero no entendemos ¿cuál libertad celebran o de quienes?. Acaso no son ellos mismo los que atropellan y reprimen sin piedad a las organizaciones y procesos sociales, cuando marchan para reivindicar derechos o exigirle al Gobierno que cumpla con acuerdos incumplidos, que además están establecidos en  la Constitución y las leyes.

No cabe más que pensar que la  independencia  que se dio hace doscientos años fue  la libertad para que repriman al país diverso, para acabar las culturas y para saquear los recursos naturales que no se llevaron los españoles.  Por eso así como desde hace 518 años, los pueblos indígenas seguimos resistiendo por defender la vida y mantenerse como pueblos.

Ante esa situación,  la población civil, las organizaciones y la sociedad en general debemos estar más unidos para defender lo poco que nos queda. Esto es muy importante para la subsistencia de la humanidad y de las nuevas generaciones, por eso debemos luchar contra todo ese modelo mezquino que nos quiere despropiar de nuestra nación.