El pasado sábado 14 de agosto se reunieron en la María Piendamó (Cauca) líderes indígenas y comunidades negras y campesinas para encontrarse con el Juez español Baltasar Garzón, asesor de la Corte Penal Internacional. También estuvieron presentes la fiscal española Dolores Delgado y  el Padre Francisco de la Ru quien es delegado de la comisión garante de la minga social y comunitaria.

 

Esta es la segunda visita que hace el Juez Garzón a este territorio, la primera fue en el año 2000. Esta vez, al igual que la anterior, lo recibió la Guardia Indígena levantando sus bastones de mando como muestra de que las comunidades indígenas están en resistencia civil  ante la constante violación de los derechos humanos por parte de los grupos armados de derecha e izquierda.

El consejero mayor del CRIC, Elides Pechene dio el saludo de bienvenida al Juez Baltasar Garzón y agradeció en nombre  de las autoridades indígenas por los  diez años de acompañamiento que han significado una esperanza para seguir visibilizando en el ámbito internacional la violación de derechos humanos existente en Colombia. De la misma manera agradeció  a todos los participantes, e invitó a las víctimas para que no tengan miedo de denunciar y para que colaboren recogiendo material probatorio para que las demandas puedan avanzar más rápido y lograr que los responsables de los hechos respondan ante las autoridades judiciales.

“Hemos sentido en carne propia que estos últimos ocho años del presidente Álvaro Uribe ha sido una de las épocas mas duras para el movimiento indígena porque nos ha tocado enterrar a muchos de nuestros hermanos indígenas que han caído por defender el derecho de vivir dignamente en sus territorios. Las  víctimas directas han sido las viudas y los niños que viven el olvido absoluto por parte del gobierno nacional,  familias humildes y trabajadoras que han tenido que desplazarse dejando sus parcelas abandonadas” fueron  las palabras del consejero.

Luego, el programa de derechos humanos del CRIC, en cabeza del abogado Álvaro Mejía dio a conocer el análisis de casos reportados en materia de violación de Derechos Humanos en población indígena ocurridos en el departamento del Cauca hasta julio de 2010. El informe  muestra que la ocupación integral del territorio ha causado una enorme violación de los derechos humanos en el Cauca, colocando en evidencia que el norte del cauca es la zona más afectada. Según las cifras se demuestra que el Municipio de Toribio es el territorio que ocupa el primer lugar en esta materia.

También se ratificó que en estas comunidades continúa el alto riesgo de accidentes por causa de MUSE (Munición sin explotar) en los resguardos de Tacueyo, Corinto Huellas y Canoas. En estos resguardos es donde con mayor reiteración se han presentado enfrentamientos armados y en los cuales la comunidad ha denunciado ante las autoridades indígenas la identificación de campos con MUSE. Esta alerta la respalda también la Defensoría Delegada para la evaluación de riesgos de la población civil como consecuencia del conflicto armado.

Ante esta situación tan precaria que viven las comunidades no podemos afirmar que las consecuencias del conflicto disminuirán pues existe un gran incremento de presencia de los actores armados dentro de los territorios indígenas. En los meses de mayo y junio de 2010 se presentó un significativo incremento de hechos en todo el norte del Cauca debido a los constantes enfrentamientos de la guerrilla de las FARC y del ejército nacional. Esta situación  plantea la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección y prevención a las comunidades dentro del plan minga en resistencia.

El juez en su intervención  dijo “son diez años de acompañamiento y  cada año se ha ido renovando el compromiso para ayudar. Lo he hecho como amigo y como persona comprometida con la defensa de los derechos humanos de las comunidades indígenas, no sólo en el Cauca sino en todo el  país,  ya que cada día son más evidentes los asesinatos selectivos”.

“Sabemos que las comunidades originarias están  siendo desconocidas por la justicia de su propio país. Por lo tanto ha sido necesario denunciar los hechos en el ámbito internacional para que desde afuera se pueda visibilizar lo que sucede en Colombia”. Ratificó el Juez.

Del mismo modo los representantes de las consejerías de las diferentes  zonas hicieron  entrega oficial al juez de las denuncias y los documentos de los diferentes hechos de violación  de derechos humanos que han sucedido en el Cauca. Esto con el fin de que sean estudiados cuidadosamente para que luego se pueda acceder por la vía jurídica a verdaderas instancias de justicia y reparación.

Como muestra de agradecimiento y reciprocidad los lideres indígenas  entregaron a los parlamentarios una mochila como símbolo de vida. “Para la mujer Nasa la mochila representa el útero donde se gestan y crecen las vidas que hoy ha sido arrebatadas por los señores de la guerra” dijo una comunera.

Finamente la consejería mayor del Consejo Regional Indígena del cauca reiteró sus agradecimientos y anticipó la invitación al Juez Garzón para que haga presencia en la celebración de los 40 años del CRIC que se realizará el próximo año.

[ Autor: Tejido de Comunicación – ACIN]