Los presos políticos recluidos en el patio No. 3 de la Prisión de Girón – Santander, denunciamos ante la opinión pública nacional e internacional, la falta oportuna en la debida atención médica es el pan de todos los días, por lo que se debe acudir a tutelas y huelgas de hambre, lo que hace que se convierta en una tortura acceder a la salud; el falso diagnóstico es ya una constante política de las E.P.S.