Con la participación de más de 80 personas entre ellos Autoridades de los Resguardos del Norte del Cauca, consejeros, tejidos de vida de la Cxab Wala Kiwe – ACIN y comunidad en general, se dio inicio a la junta directiva en Bodega Alta del Resguardo de Huellas – Caloto, para continuar con la minga de control territorial frente a la agresión de los grupos armados con el Plan de Vida, la gobernadora de este Resguardo, Olga Pazú, hizo la bienvenida y de esta manera inició el encuentro de autoridades tradicionales (Junta directiva) el día 17 de agosto del 2011.

La Gobernadora motivó a los participantes a que nos dispongamos a reflexionar, decidir y actuar para continuar resistiendo como pueblos indígenas ante la adversidad de la guerra donde solo sacan provecho unos pocos. “La clase pobre es la que termina siendo utilizada y exterminada por ambos actores, a esto es que tenemos que ir a las comunidades, a concientizar para que el control territorial e inicie desde las familias, que no lo haga solo la guardia indígena porque ante la defensa del territorio y la vida todos somos guardias”, esta fue parte de la reflexión que hizo la gobernadora de Huellas – Caloto.

A este saludo, el consejero del CRIC, Luis Danilo Secue, dijo que: “En otras zonas del Cauca también se está revisando el tema del control territorial, minas, cultivos ilícitos, conflicto armado y multinacionales. Cada zona del Cauca avanza de acuerdo a su dinámica y se espera que apoyen lo que se haga acá en el territorio del norte del Cauca, al igual vamos apoyando las acciones que se van realizando en todo el Cauca”.

El consejero del CRIC recordaba y proponía: “Reactivar las mingas territoriales con el apoyo de los tejidos de vida, jóvenes, mujeres, consejeros y cabildos, para reflexionar con la comunidad, escuchando sus inquietudes y propuestas frente al que hacer para exigir nuestros derechos, defender el territorio y los planes de vida que hemos construido juntos. Posteriormente con la comunidad consiente hay que hacer acciones de control territorial, para ello tenemos que tener claro que es lo que buscamos defender, no se trata de confrontar a otros, lo que se busca es crear una armonía desde las familias donde se pueda exigir el respeto a la vida y al territorio, donde extraños no vengan a copar e imponer orden en nuestra casa, de otra manera nosotros debemos poner orden en nuestro territorio como lo han hecho nuestros mayores con su sabiduría”.

Otro punto que reflexionó el consejero del CRIC, fue: “Las economías provenientes de los cultivos ilícitos, entendiendo que la hoja de coca es una planta sagrada, que ha sido mal utilizada por algunos y que ha sido transformada en productos que destruyen el ser humano. Frente a esto tenemos que buscar otras formas de subsistir, mirar otros ejemplos de comunidades de este territorio que han vivido de cultivos tradicionales como la cabuya, el maíz, el frijol, el café, la papa, entre otros y reactivar las huertas con productos alimenticios que nutran a nuestros hijos para que sean fuertes y le aporten a nuestros planes de vida para pervivir como pueblos indígenas dentro del continente”.

En este día se hizo trabajo en comisiones para analizar y tomar decisiones frente a las actividades de la minga de control territorial, para ver que implica y como debemos actuar, teniendo en cuenta siempre la participación de todas las autoridades donde tengamos claro el principio de defender  la vida toda.

Al final de la tarde, después de un buen trabajo en comisiones por planes de vida se concluye que:

Es conveniente hacerle un merecido reconocimiento a la Guardia Indígena por su trabajo, permanencia, motivación y conciencia para cuidar el territorio, teniendo en cuenta que en la vereda El Tierrero del Resguardo de Huellas – Caloto, inició la Guardia con al menos unos 50 integrantes y luego de 10 años son más de 2000 guardias, lo conforman mayores, jóvenes, mujeres y niños. Actuando y acompañando todos los espacios comunitarios a nivel local, regional, nacional e internacional. Es oportuno que el día 22 de Agosto de 2011 se conmemore este gran caminar del pueblo indígena del norte del Cauca, Cxab Wala Kiwe – ACIN.

Las autoridades de cada Resguardo Indígena deben reunirse con su comunidad y guardias para establecer mecanismos de control territorial, además hay que socializar ampliamente estas actividades a través de los diferentes medios propios de comunicación. Para que esto sea público ya que no hay nada que esconder.

Hacer los recorridos de acompañamiento en las veredas para concientizar y reflexionar sobre los cultivos ilícitos, donde las propuestas se construyan con la comunidad, de lo contrario caemos en el juego de que el gobierno quiere con sus propuestas que nunca las cumple como paso en el año 1995 y lo único que hiso fue causarnos problemas y dividirnos para el cumplir sus propósitos de obediencia al modelo neoliberal.

Tenemos que pensar en proyectos alternativos que ayuden realmente a mejorar la calidad de vida de la gente y que sean rotativos para que todos tengamos oportunidades y beneficiemos.

Retomar los planes de control territorial, evaluarlos y actuar de acuerdo a los mandatos construidos entre todos pero hay que empezar desde las familias, los estudiantes, los jóvenes y comunidad en general.

Hay que tener claro cómo vamos a reaccionar cuando nos demos cuenta que van hacer una masacre o un robo, no solo la guardia debe ir a confrontar, se debe hacer con sabiduría y con toda la comunidad, eso también es resistencia.

Los cabildos hacen acciones como es el control de motos robadas, esto se debe apoyar y también presentar alternativas para que los comuneros que quieren tener una moto la puedan obtener por la vía legal, valiéndose del respaldo de las autoridades tradicionales.

Se debe definir los procedimientos de cómo vamos a proceder como guardias, teniendo claras las funciones y documentando todo con un análisis jurídico y espiritual para no tener inconvenientes con otras personas, además todo esto debe ser público y de conocimiento nacional e internacional.

Darle espacio a las personas que han sido reclutadas por los grupos armados y que quieran volver a la comunidad, debe haber un apoyo por parte del cabildo con un seguimiento a los compromisos adquiridos por parte del comunero con la comunidad.

Los abogados y todos debemos emprender procesos de denuncia y demandas a las leyes y proyectos que atentan contra la vida y el territorio.

Ya es hora de pasar de la palabra a la acción, construyamos alternativas para encontrar economías propias para la comunidad, sobretodo sembremos comida para no aguantar hambre. Todos y todas a defender el Plan de Vida.

Tejido de Comunicación – ACIN.

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