El 8 de marzo del 2012,  la comunidad de la zona norte del Cauca, encabezada por el Cabildo Indígena de Jambaló, decidió salir a las calles y carreteras de Santander, Caloto,Tacueyó y Toribio hasta llegar a la vereda La Esperanza de Jambaló. Con el fin de manifestar un rechazo al conflicto armado.

 


En este recorrido se recordó a todos los que han caído en medio de este conflicto armado, a líderes y comuneros. Unos fueron asesinados por la guerrilla, otros por los paramilitares y otros por la fuerza pública.

 


Como acto simbólico se pintó las piedras de colores, se extendieron las banderas y pasacalles, donde cayó cada víctima, asesinadas y asesinados por hablar en nombre de una comunidad, por señalamientos de colaborar en cualquier grupo de izquierda o derecha, por defender la vida toda.

 

Se movilizaron 9 Chivas (carro grande), la guardia con sus bastones de mando, sus pañoletas de colores, sus sombreros de iraca, todos con muchas ganas de decirle al mundo no estamos de acuerdo con tantas muertes a manos de la guerra. “no queremos que las botas militares pisen nuestro territorio”.

 


En el reguardo de Toez, los niños de la escuela hicieron la bienvenida con banderas de colores a todos los caminantes, la comunidad de este resguardo ofreció un almuerzo muy oportuno a todos los visitantes. La gente agradeció por la bebida refrescante y la comida, para poder tener más energías y así poder seguir con el recorrido.


En el puente del corregimiento El Palo, donde hace tres semanas hubo un fuerte enfrentamiento entre las farc y el ejército colombiano, se caminó desde el puente hasta la salida de este corregimiento, los niños acompañaron con banderas blancas y se dijeron mensajes de rechazo a todo lo que atente con la vida en el norte del Cauca.

En cada sitio se recordó la historia de cada víctima, las autoridades hicieron sus pronunciamientos al igual que las mujeres. También se hizo la armonización en cada lugar donde se derramó la sangre de las víctimas, porque un mayor expresó que: “Tanta sangre derramada está contaminando el ambiente y la nueva generación esta respirando este aire contaminado de muerte, es por eso que algunos jóvenes ahora ven como opción las armas ”.

 

Las carreteras se vistieron de colores y sonidos, los carros pitaban, la gente hacia bulla y se aleateaban las baderas blancas, haciendo sentir que los muertos están mas vivos en nuestro proceso.

 


Esto es un gran paso para continuar esta movilización, para rechazar la presencia de la guerrilla y de la fuerza pública del estado colombiano en los territorios indígenas, afros y campesinos. También se manifestó un rechazo total a la explotaciòn desaforada de las multinacionales en los territorios.

 

Tejido de Comunicación

tejidocomunicacion@gmail.com