Porque matando a nuestros líderes e integrantes de nuestros pueblos, que lo vienen desde hace rato, pero aquí estamos y seguiremos a través de las nuevas generaciones en defensa de nuestra vida digna.

  
Del 27 de agosto de 1990 al 27 de agosto de 2012 son 22 años de indignación e incansable rechazo por parte de la comunidad indígena del pueblo Tontuna Resguardo de Totoró – Cauca, indignación por el vil y el cobarde asesinato de uno de sus líderes, MARIO SÁNCHEZ BENACHI, en manos de la injusticia del gobierno nacional aliada con terratenientes de la zona. Para la época MARIO SÁNCHEZ y en compañía de otros comuneros, venían adelantando un fuerte trabajo por el fortalecimiento cultural, defensa de los derechos del pueblo indígena y la liberación de la Madre Tierra.
 
Para no OLVIDAR:
 
Desde 1984, Mario Sánchez, venía siendo objeto de señalamientos, persecuciones, allanamientos a su casa de habitación y amenazas de muerte por parte de quienes lo consideraban enemigo por el hecho de haber contribuido jurídica y activa mente al saneamiento de una buena parte del territorio que hace parte del título 1630. Además, Mario junto la comunidad ayudo a fortalecer el Namtr+K (idioma propio de los Tontuna), las mingas comunitarias y la autoridad tradicional, él exigió el derecho y el saneamiento del territorio en un cien por ciento a través de actividades de concientización para la apropiación de toda la comunidad.
 
El día 27 de Agosto de 1990, MARIO SÁNCHEZ,  compartía de unos tragos con sus compañeros, muchos de ellos, líderes de la comunidad, se sintió muy tomado (borracho) y se marchó a su casa ignorando que alguien estaba siguiéndole los pasos para asesinarlo. El compañero Bolívar Sánchez dijo: “un día antes estuvimos en una reunión de evaluación del proyecto Luces del Mañana en el hogar infantil de Totoró en el cual estuvieron Luis Carlos Bello, Artenio Sánchez, Hermes Angucho y Aníbal Jiménez, en ese día se llevaba a cabo la procesión del amo Jesús, así que las cantinas estaban abiertas, recuerdo que nos cruzamos en horas de la noche en la calle y salimos bastante ebrios para nuestras casas, apenas logro recordar que nos despedimos en el sitio de la cancha, pero de allí no recuerdo absolutamente nada, cuando al día lunes a eso de las 7 de la mañana me informan que el compañero Mario Sánchez apareció muerto”.
 
Efectivamente varias personas lo siguieron hasta unos 300 metros antes de llegar de su casa donde hay un barranco, lo capturaron, lo torturaron, lo tiraron por el barranco y luego lo remataron a golpes hasta matarlo para hacer creer que su muerte era a causa de la caída, pero los resultados de la necropsia daban como resultado que se trató de una horrible tortura.
 
El 28 de agosto de 1990, fue muy doloroso para esta comunidad, les tocó hacer el levantamiento del cadáver, de un indígena que tenía perspectivas grandes de organización en su comunidad y a nivel regional.
 
Quedó viuda  Carmen Tulia Luligo y huérfanos sus 7 hijos; Luz Miriam de 10 años, Luís Hernán de 8 años, Ana de 6 años, José Mario de 5 años, Sofía de 4 años, Juan Pablo de 2 años y en gestación su último hijo Didier Artenio Sánchez.
 
Luis Hernán Sánchez, uno de sus Hijos dice: “Lo que recuerdo de mi padre es que siempre andaba en reuniones, en ocasiones me llevaba y me gustaba mucho andar con él, una vez fuimos de Totoró al resguardo de Quintana a pie atravesando las montañas del Resguardo de Polindara. La mayor parte del tiempo no se encontraba en la casa llegaba esporádicamente y en su ausencia siempre lo llegaban a buscar, el ejército y la policía señalándolo que era cabecilla de un frente guerrillero, Cuando mi madre Carmen me mandaba al pueblo a hacer los mandados, los policías me abordaban y me decían “¿Dónde está su papá?…Díganos donde está y te compraremos gaseosa y galletas y si sobra plata pues te la damos para que compre lo que usted quiera”. En una ocasión estábamos durmiendo con mi papá en la casa y como a la una de la mañana golpearon la puerta diciendo “Salí hijueputa guerrillero, salí que vamos a ver quién es quié…! No te confíes que lo que es…tenemos que acabar hasta con el nido de la perra”, patearon la puerta hasta casi tumbarla y se fueron. Al día siguiente pudimos darnos cuenta de que habían llegado muchos por la cantidad de colillas de cigarrillo que habían regadas por toda la casa y así muchas cosas que prefiero no mencionar ya que me invade un sentimiento de dolor y rabia”. 
 
“De aquel 27 de agosto de 1990, recuerdo que a la hora del almuerzo nos comentó que muy pronto se iría por un tiempo, ya que tenía que realizar unos trabajos con el CRIC y una ONG en otro país y que por lo tanto deberíamos portarnos bien, no fallar a la escuela y ayudar a mi mamá, como reacción rara nos dijo alístense todos que los voy a bañar, y efectivamente nunca lo había hecho, y ese día, nos bañó a todos comentando que uno podía ser pobre y remendado pero el aseo y el orden dependía de cada uno de nosotros. Luego en la tarde salió al pueblo a una reunión que tenía, dijo que llegaría temprano, pero cayó la noche y no llegó, nos dormimos esperándolo. Al día siguiente 28 de agosto estábamos desayunando, eran las 7 de la mañana cuando llego la esposa de mi tío Manuel Transito y le dijo a mi mamá “Carmen…! Porque no vas a traer a Mario que esta allá abajo dormido” Mi mamá salió corriendo pero al llegar al lugar se encontró con la desagradable sorpresa de que estaba muerto. La confusión, el dolor, el llanto y la desesperación se apoderó de toda la familia, yo no podía creerlo pero la realidad era esa a mi papá lo habían asesinado”, expresó con mucha nostalgia su hijo, Hernan.
 
Como siempre la “justicia” de este país se comprometió a esclarecer los hechos pero hasta el momento no se tiene datos sobre los autores materiales del crimen
 
Muchos procesos decayeron a causa de este asesinato pero la comunidad y los líderes no bajaron la guardia y continuaron luchando y trabajando las ideas que conjuntamente traían con MARIO SÁNCHEZ. Hoy vamos a paso lento pero firmes aplicando el legado que nos dejó sus ejemplos de lucha, organización, sabiduría, decisión y firmeza, siempre como herencia para nuestras nuevas generaciones, ya que él también lo aprendió de otros líderes que hoy no nos acompañan físicamente pero su espíritu está presente en cada una de las puntadas de pervivencia como Pueblo Tontuna. 
 
MARIO SÁNCHEZ BENACHI, las semillas que sembraste las seguiremos cultivando y fortaleciendo por el pueblo que te aclama, nunca borraremos de nuestras mentes su legado y estarás presente por siempre y para siempre.
  
Pueblo Indígena Tontuna Resguardo de Totoró – Proceso de comunicaciones Radio Libertad 93.6 red AMCIC – Cauca – Colombia.