Que Colombia sea un país extremadamente desigual no es un secreto para nadie, aunque para la mayoría de su población sí lo sean sus causas. Una de ellas,
quizás la más importante,  está relacionada con la forma injusta en que sus habitantes aportan para financiar los gastos del Estado, es decir, lo que pagan en impuestos.

El propio gobierno reconoce que en Colombia los grandes grupos empresariales pagan –proporcionalmente- menos impuestos que los asalariados y trabajadores independientes. Para el año 2011, los impuestos que no pagaron los primeros le costaron al país 6 billones de pesos, mientras se niegan recursos para la educación, la salud, los alimentos, la vivienda y cientos de necesidades básicas insatisfechas para los colombianos.

En este escenario de injusticia y después de la promesa presidencial de “hacer llorar a los ricos”, se radicó ante el Congreso una reforma tributaria que no solo mantiene los privilegios a los más ricos de los ricos, sino que se los aumenta, financiados por los más pobres y la clase media. Por un lado se disminuye el impuesto a la renta del 33 al 25%; por otro se gravan los ingresos de los trabajadores por más de 2.3 millones de pesos mensuales y se aumenta el IVA a bienes y productos sensibles. Hasta el ‘corrientazo’ se gravará con un impuesto de 7%.

Cambiar esta situación obliga a la sociedad a conocer a fondo la manera como el Estado se apropia de una buena parte de los ingresos y no los retribuye en beneficios sociales. Por tal motivo, presentamos la campaña Lo justo y necesario, para exigir a los grandes capitales nacionales y extranjeros que muestren lo que pagan y demandar que sea lo justo. Para reclamarle al Estado que retribuya a la población lo necesario para mejorar su calidad de vida.

Cedetrabajo.org

Justicia Tributaria en Colombia

Mario Alejandro Valencia, economista y profesor universitario
@mariovalencia01

www.lojustoynecesario.com