El alto tribunal hizo un llamado de atención para que se cumplan las normativas ancestrales. La Corte Constitucional instó a las Corporaciones Autónomas Regionales (CAR) para que respeten las normas establecidas por los pueblos indígenas y su jurisdicción en temas ambientales.

 
El alto tribunal consideró que en las normas ancestrales se presentan castigos y sanciones para las personas que exploten los recursos de las reservas forestales donde habitan, las cuales deben ser acatadas por la entidad gubernamental.
 
En la decisión judicial se manifiesta que en varias regiones del país no existe una coordinación entre las jurisdicciones indígenas y las CAR cuando se realizan talan bosques en los resguardos indígenas, por lo que muchas veces las jurisdicciones de los pueblos ancestrales son vulneradas.
 
La Corte le dio un plazo de un mes a Corpocaldas para que coordine con las autoridades indígenas de Riosucio, Caldas la implementación de una acción en contra de una familia que habitaba en dicho resguardo y que se dedicaba a la deforestación y venta de madera de la reserva forestal en esa región.
 
Igualmente se le advirtió a la Corporación Autónoma para que que cambie las sanciones establecidas en las resoluciones en las que solamente se cobraba  una multa por la madera que sacaban de manera ilegal del resguardo, pero no exigía su devolución.
 
La comunidad indígena interpuso una tutela contra la decisión de las CAR de seguir aplicando dichas sanciones, que lo único que hacían era crear un impuesto para poder sacar la madera de la reserva forestal, pero en realidad no infringía sanciones ejemplarizantes contra los que depredaban los bosques.
 
Por: Elespectador.com