El día 4 de enero en el municipio de Santander de Quilichao (Cauca) la Fiscalía General de la Nación detuvo a Manuel Antonio Bautista Pequí. A Manuel Antonio Bautista Pequí se le imputa un delito de rebelión, fundamentado en varios elementos de cargo como información encontrada en un computador de las FARC y la versión de un miliciano reinsertado, entre otros.

Las pruebas de cargo no han podido ser analizadas por la defensa, ya que no les han sido entregadas, a pesar de ser elementos materiales probatorios. Es importante recordar que el pasado 25 de julio Manuel Antonio Bautista Pequí había sido presentado por un noticiero1 como alias “Tuqui”, un supuesto enlace militar entre la guerrilla de las FARC y la comunidad indígena nasa. Sucesivamente, una nota periodística publicada por RCN y el periódico El Liberal anunciaron que alias Tuqui [el verdadero] había sido dado de baja.

Manuel Antonio Bautista Pequí es el coordinador de la red de apoyo y protección de niños y niñas en la región del Cauca, una iniciativa de la sociedad civil que se viene adelantando desde hace 3 años con el apoyo de la cooperación internacional, para la prevención de la vinculación de la niñez al conflicto amado.

Manuel Antonio Bautista Pequí cuenta con una relación laboral vigente con una de las organizaciones de PODEC a través de un convenio firmado con el Tejido Defensa de la Vida de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN), espacio que está siendo fuertemente atacado, y cuyo coordinador, el líder Germán Valencia, ha sido hostigado y amenazado vía telefónica.

Como plataforma de organizaciones europeas, PODEC expresa su solidaridad con la ACIN y su guardia indígena. Confiamos en la honestidad de Manual Antonio Bautista Pequí y nos unimos a las denuncias de la represión violenta cometida por el ESMAD el día 5 de enero contra las familias indígenas que estaban acompañando a Manuel Bautista, la cual provocó 24 heridos.

Solicitamos a la Fiscalía, a la Procuraduría y a la Defensoría del Pueblo:

1. Se analice cuidadosamente el caso de Manuel Antonio Bautista Pequí, para descartar que se trate de
un montaje judicial destinado a intimidar la defensa de los derechos humanos y del DIH que viene
desempeñando la guardia indígena de la ACIN;

2. Se realice un juicio independiente e imparcial con las garantías del debido proceso, incluyendo el
acceso inmediato de la defensa a las pruebas de cargo;

3. Sugerimos a la OACNUDH y a la delegación de la UE en Colombia que monitoreen
atentamente este caso, por tratarse de un reconocido defensor de derechos humanos y, de ser
posible, que asistan a las audiencias del proceso.

1http://www.cmi.com.co/?pr=NOTICIERO%20CMI, miércoles 25