Memoria Y Camino del Tejido de Comunicación

Los días viernes, como cada 15 días desde hace 3 años, el parque del barrio el Rosario de Santander de Quilichao abre su espacio a los agricultores que vienen a ofrecer sus productos. 

 

Gracias a la iniciativa del Tejido Económico Ambiental de la ACIN, los indígenas y campesinos agricultores tienen la oportunidad de ofrecer directamente sus productos sin tener que depender de intermediarios y comerciantes que, en su mayoría, devalúan sus productos y se quedan con las ganancias. Además la población del área urbana tiene la oportunidad de acceder a alimentos sanos, cultivados orgánicamente con la confianza de que vienen de la mano de los mismos productores.

 

Además de ser un apoyo a la economía de las familias productoras, esta iniciativa es un gran paso hacia la autonomía alimentaria frente a las amenazas que traen los tratados de libre comercio con la invasión de productos extranjeros en el país,  los dañinos alimentos procesados y la privatización de semillas. Sin nombrar el grave riesgo que corre el agro con el fortalecimiento de la locomotora minero energética que arrasará con territorios de cultura agrícola para reemplazarlos por cuevas de producción de oro y otros minerales.

 

 

El Tejido de comunicación estuvo participando en esta jornada de Mingalerías y habló con algunos de los productores. Conversamos con doña Margarita Conda del resguardo de Huellas Caloto, ella nos habla de los productos que ofrece y cómo le ha ayudado este espacio para su familia.

 

 

También hablamos con el señor Ciro Rivera del resguardo de Huellas Caloto, quien nos explica la manera en que cultivan estos productos orgánicos y del gran aporte que esta iniciativa ha significada para poder ofrecer sus alimentos.

 

 

Por: Tejido de Comunicación – ACIN