Memoria Y Camino del Tejido de Comunicación

Por determinación de la Asamblea General de las Naciones Unidas, hoy 9 de Agosto se conmemora el Día Internacional de los Pueblos Indígenas como reconocimiento a más de cinco mil grupos  en 90 países donde se hablan 7 mil idiomas diferentes  y que hacen parte de las poblaciones más desfavorecidas y vulnerables del mundo.

En esta fecha es preciso recordar que en Colombia existen 102 pueblos indígenas integrados por un millón 378 mil 884 personas  asentadas en 710 resguardos así como en diferentes territorios rurales y urbanos del país; 18 de estos pueblos se encuentran en peligro de extinción como lo indica la propia Corte Constitucional que le ordenó al gobierno nacional el adelanto de planes para  evitar su desaparición.

Esta conmemoración en el Departamento del Cauca se cumple en momentos en que buena parte de los gobernadores de cabildos, dirigentes comunitarios y sus organizaciones han sido declaradas objetivo militar por parte de grupos paramilitares; cuando el gobierno nacional aprueba concesiones mineras dentro de los territorios ancestrales, cuando la respuesta a las peticiones de las comunidades para su pervivencia es la violencia, como se evidenció en la Minga por la vida, el territorio, la dignidad, la paz y el cumplimiento de acuerdos, donde fueron asesinados dos comuneros y varias decenas resultaron heridos por usos no legales de la fuerza por parte del ESMAD (Escuadrón Móvil antidisturbios).

Celebración del día de los pueblos indígenas en un contexto de fin del conflicto armado con las FARC, proceso que saludamos, pero que hasta el momento no ha entrado en un actitud dialogante con las autoridades y comunidades indígenas, de manera que se pueda diseñar una dinámica para la etapa del pos-acuerdo en la cual se garanticen nuestros derechos y podamos a la vez contribuir a la construcción de una paz estable y duradera. Nos basamos en esta exigencia de acuerdo al oficio de información pública realizada desde el Gobierno Nacional, donde se manifiesta que “la puesta en marcha de las zonas veredales transitorias de normalización ZVTN demandara una exigente labor de coordinación entre el Gobierno Nacional y los Gobiernos Departamentales y Municipales para garantizar que su funcionamiento se realice sin afectar la vida económica, política y social de las comunidades, ni el ejercicio de sus derechos así como de las organizaciones étnicas y comunales que tengan presencia en los territorios”. En ese sentido como CRIC, reiteramos el llamado a que se realice de manera urgente una sesión de la mesa de la Habana Cuba en el Territorio de Convivencia, Dialogo y Negociación La María Piendamo, Cauca.

Estos diálogos son urgentes y necesarios, ya que desde nuestra organización se han venido denunciando que en la actualidad se incrementa la presencia de grupos armados no identificados, en zonas de resguardos, que amenazan cabildos y conminan a familias enteras al abandono de sus tierras.

Para los pueblos indígenas que durante siglos nos hemos resistido a desaparecer, es la fecha para gritar al mundo entero que los gobiernos siguen buscando mecanismos para nuestra desaparición ante los fracasos de otros intentos  y que por lo tanto seguiremos luchando por la reivindicación de nuestros derechos. Es tiempo de recordar que desde la conquista hasta hoy son millones de indígenas los que han desaparecido físicamente  por acción de los llamados conquistadores, la fuerza pública, los grupos paramilitares, la guerrilla, los pájaros al servicio de los terratenientes y en general por todos los que se oponen a nuestra pervivencia.

Hoy 9 de agosto de 2016 los pueblos indígenas agrupados en el Consejo Regional Indígena del Cauca CRIC, llamamos a todos los sectores populares y democráticos del país para que avancemos conjuntamente en esta coyuntura histórica para parar la guerra y enfilar nuestra movilización social y nuestros procesos organizativos hacia la construcción de un país equitativo, justo, diverso y democrático, en donde no haya racismo ni exclusión y se garanticen los derechos para todos los colombianos y colombianas; en donde el Estado no sea un botín de los corruptos y el modelo económico no sea una imposición al servicio de unos pocos que convierten en pobres a las grandes mayorías, despojándonos de nuestros derechos, territorios y culturas.

Fuente: CRIC