En el gobierno de ‘unidad nacional’ de Santos aparentemente no habrá mayor oposición, salvo la del Polo Democrático Alternativo. Sin embargo, una red de organizaciones sociales se está preparando para hacerle frente al nuevo presidente en temas clave como el comercio internacional, la minería y las bases militares.

 

Se trata de la Red Colombiana de Acción Frente al Libre Comercio (Recalca), que congrega a 50 organizaciones de base, profesionales, sindicatos y movimientos sociales en Colombia en contra del libre comercio.

Desde 2004 a través de misiones de cabildeo, foros, acciones populares, y movilizaciones, Recalca se ha convertido en una de las principales organizaciones que hace lobby político en foros internacionales en contra del Área de Libre Comercio de las Américas (Alca), el acuerdo bilateral de libre comercio con Estados Unidos en Colombia y también con Canadá y con Europa.

Algunas de los miembros de Recalca son Fescol, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Organización Nacional Indígena de Colombia (Onic), Indepaz, y la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (Acin). Hoy Recalca tiene la Secretaría General de la Alianza Social Continental que reúne a cerca de 500 organizaciones que se oponen a libre comercio en América Latina.

“Hemos enviado misiones de cabildeo al Congreso de Estados Unidos y a Europa”, dijo Enrique Daza, director de Recalca. Para hacer este lobby, se articularon con sindicatos que tienen interlocución con congresistas democrátas gringos y organizaciones como Oxfam y Action Aid que ejercieron presión para bloquear el TLC con Estados Unidos. Y hasta el momento, han logrado dilatar la ratificación del tratado en el Congreso de ese país. Su lobby en Canadá sí fue insuficiente, pues Uribe logró aprobar ese tratado antes de dejar su cargo y la Corte ya lo declaró constitucional. “Cuando Uribe ha dicho que hay terroristas y comunistas hablando mal del gobierno en el exterior se ha estado refiriendo a nosotros”, dijo, entre risas, Daza.

Aunque Recalca agrupa a muchas de las ONG que en el pasado se opusieron al Plan Colombia y que tenían una agenda de derechos humanos, hoy muchos de sus militantes hablan en clave de libre comercio. Lograron que durante el anterior gobierno el tema de los derechos humanos y el comercio se volvieran indisolubles, algo que no ocurría antes.

“Recalca se ha salido de la agenda local del conflicto en Colombia – la guerra, la coca, las Farc- y ha ampliado la agenda internacional de los movimientos sociales”, dijo Aurelio Suárez, economista y miembro del Comité Ejecutivo del Polo Democrático. “También han empezado a hablar de libre comercio entrando en diálogo con sindicatos internacionales y Ong norteamericanas”.

“Estamos esperando a que arranque el gobierno de Santos para hacer una asamblea de Recalca para analizar la política del nuevo gobierno y definir nuestros énfasis”, dijo el director de Recalca a La Silla Vacía. “Creemos que el gobierno de Santos será igual al gobierno de Uribe en los temas fundamentales, por eso tendremos nuestra posición de rechazo a los tratados de libre comercio, las bases militares, y la gran minería”.

Los tres temas clave

Para Recalca, las relaciones comerciales entre los países no deberían depender de la firma de tratados de libre comercio y señalan que países desarrollados como Brasil, China y Francia no firman este tipo de acuerdos. “Las políticas neoliberales se vuelven irreversibles con un tratado de libre comercio”, dice Daza, quien cree los TLC no establecen buenas relaciones comerciales entre países, sino arreglos desvantajosos para los pequeños países, con respecto a los mercados de las grandes potencias.

“El resultado de los tratados es de la dependencia de la economía nacional frente a Estados Unidos y las otras potencias. Nos volveremos especialistas agrícolas tropicales: caucho, café, tabaco, banano, frutas y minerales, como en la época de la colonia”, dijo el director de Recalca a La Silla. Además, anticipó que los principales problemas de los TLC vienen con su implementación. Y dijo allí estarán estas organizaciones de Recalca promoviendo la movilización social en su contra.

Según Recalca, la minería es uno de los grandes beneficiados de los TLC ya que estos tratados eliminan los condicionamientos a la inversión y van a generar aún más presencia extranjera por el boom de la minería. Por eso, también se oponen a los grandes proyectos de explotación minera que el gobierno de Uribe tanto impulsó y que el gobierno de Santos quiere continuar. Además, se oponen al boom minero por sus impactos ambientales, especialmente de los proyectos de explotación minera a cielo abierto.

“Colombia se va a terminar especializando en minería y esto sólo trae atraso. Es la explotación de un metal con procesos coloniales donde al final de todo el proceso, sólo queda el hueco en la tierra”, dijo Enrique Daza.

La tercera obsesión de Daza es el tratado firmado durante el gobierno de Uribe con Estados Unidos, cuya exequibilidad discutirá hoy la Corte Constitucional.

“Las bases militares son el aparato armado de los tratados de libre comercio”, dijo Enrique Daza. Explicó que las siete bases militares que Colombia le permitirá usar a Estados Unidos muestran la pérdida de soberanía de Colombia y a la vez constituyen una amenaza para América Latina.

“En algún momento esto tendrá que estallar. No damos por perdida ninguna pelea”, dijo Daza, una de las caras que tendrá la oposición a Santos.

 

[ Fuente: La silla vacía ] [ Autor: Laura Rico Piñeres]