Hablar de biodiversidad puede considerarse un ejercicio abstracto si no se relaciona con el territorio. De esta manera, las comunidades locales reconocen su oferta en la medida en la que esta se haga presente en sus prácticas tradicionales, sociales y económicas.

 

También perciben su escasez o abundancia, en la medida en la que el uso de esta les permita resolver problemas específicos, o les ayude a continuar con el establecimiento, dispersión y comprensión de su papel dentro del territorio. Identificar, valorar y re-valorar estas relaciones es uno de los objetivos principales del Observatorio de territorios étnicos.

Múltiples beneficios se perciben de la existencia y el uso de la Biodiversidad en comunidades locales, de esta manera se puede percibir su aporte en la producción de alimentos, la obtención de agua y energía, en la construcción de instrumentos, en la obtención de fibras, tintes, vestido y espacios necesarios para el desarrollo de esos vínculos con la tierra.

Quizás, una de las expresiones más amplias de la biodiversidad son las plantas, se considera que existen más de 300.000 especies de plantas alrededor del mundo, y estas son importantes porque componen el renglón más amplio dentro de la oferta de la naturaleza a los seres humanos. Dentro de toda esta oferta, se reconoce la importancia de las plantas en las prácticas de las comunidades tradicionales. Las plantas, en sí mismas, se consideran expresiones relacionales del clima, la tierra, la oferta hídrica y la distribución que de estas hacen los grupos humanos.

El uso las plantas por parte de comunidades negras ha estado fuertemente influenciado por la oferta ambiental, las creencias que se tiene sobre los beneficios del uso de las plantas y las características de los territorios que habitan. Aún así, más allá de estas condiciones, el uso de las plantas está mediado por las expectativas que se tienen de sus posibles beneficios y los conocimientos locales asociados al uso de estas, es decir, el uso medicinal real y potencial que se tiene de estas.

De esta manera, el uso de las plantas para efectos medicinales está mediado por los efectos naturales curativos que ellas tengan, esto es una situación general a muchas especies de plantas. Pero su efecto está fuertemente influenciado por las prácticas mágico-religiosas que se incorporan en su uso. Es decir, no es solamente la planta la que puede ser medicinal. Es la recolección de estas, la transformación, los procesos de extracción de sus agentes medicinales químicos que hacen más o menos efectivo su uso, y a partir de eso las creencias y expectativas que tengan sus usuarios que ellas lograrán curar las dolencias o enfermedades por las cuales son conocidas.

Conocer las plantas, relacionarse con ellas diariamente y usarlas de alguna manera no necesariamente expresa conocimientos curativos que se tengan de su uso. En San Basilio de Palenque, aunque la mayoría de sus habitantes conoce los efectos curativos de algunas plantas, y las usan continuamente, sólo algunos conocen, como resultado de conocimientos heredados, ensayo y error y creencias los resultados que pueden tener la combinación de plantas, rezos y momentos específicos para ser usados.

Estos conocimientos son el resultado de la combinación de factores aleatorios que definen quién tiene la capacidad y merece recibir enseñanzas de médicos mayores. El interés demostrado durante la juventud, la paciencia para ensayar diferentes combinaciones, la credibilidad y la asertividad en encontrar las plantas necesarias en el monte.

Es de esta manera como, pensando en la integralidad del análisis del territorio y sus habitantes, el uso de plantas medicinales nos permite entender las diferentes rutas e historias que sobre el territorio han construido sus ocupantes. La forma en la que la biodiversidad es internalizada en las prácticas culturales, y como ésta se ve fuertemente modificada por estas hace parte de libros que intentan explicar la historia de grupos humanos en el territorio, en Palenque, esta situación es motivo de orgullo y hace que sus médicos tradicionales sean conocidos, consultados, y respetados como expresiones vivas de la obligatoria conexión entre la biodiversidad, las plantas, el territorio y las comunidades negras.

http://www.etnoterritorios.org/index.shtml?apc=g1b1–10&x=575