Las trasnacionales prefieren pagar las irrisorias multas del Ministerio de la Protección Social antes que respetar los derechos de sus trabajadores

De acuerdo con las leyes colombianas, cuando se demuestre que una empresa ha violado los derechos de sus trabajadores, el Ministerio de la Protección Social debe imponer multas de hasta cien salarios mínimos. Sin embargo, en Colombia las trasnacionales prefieren violar las normas laborales porque les sale más barato pagar las irrisorias multas del Ministerio, que respetar la legislación laboral.

En los últimos 2 años el Ministerio le ha impuesto a Goodyear diez multas por violar la convención colectiva firmada con Sintraincapla, sindicato que agrupa a los trabajadores de la empresa. Las sanciones suman un total de 33 millones de pesos, cerca de 17 mil dólares, para un promedio de 3 millones 300 mil pesos por sanción, es decir, 1.700 dólares, una cifra irrisoria a escala mundial.

Icollantas-Michelin ha sido sancionada en cinco oportunidades por violar las normas laborales y la convención colectiva de Sintraicollantas. Pero la suma de todas las multas es tan sólo de 9 millones de pesos, lo que quiere decir que por cinco violaciones de una trasnacional, la totalidad de las multas del Ministerio son inferiores a 5 mil dólares, una cifra irrisoria a escala mundial.

Igualmente, el Ministerio comprobó que Telmex había violado el derecho a la sindicalización tras despedir a varios trabajadores sindicalizados y fundadores del sindicato. La multa a la empresa de Carlos Slim, el magnate más rico del mundo, fue de tan solo 40 millones de pesos, un poco más de 21 mil dólares, otra cifra irrisoria a escala mundial.

Y esta situación se repite en las trasnacionales mineras, cuyos trabajadores padecen graves problemas de salud por las pésimas condiciones en las que tienen que trabajar. Por ejemplo, Drummond fue encontrada responsable de la muerte de un trabajador que sufrió un accidente de trabajo, y la multa fue de tan sólo 30 millones de pesos (16 mil dólares),de nuevo, una cifra irrisoria a escala mundial.

Es inaceptable que el Ministerio de la Protección Social sea tan laxo con las trasnacionales que violan los derechos laborales. No es posible afirmar que en Colombia rige la democracia cuando pasan este tipo de cosas. Por eso le solicito tomar todas las medidas necesarias para evitar que se sigan violando los derechos de los trabajadores.

Moir