Hermano, amigo, comunero
Aquí, de nuevo, visitarlo
En sus ríos, ojos de agua
Pantanos y quebradas

 
Yo supe de sus pasos 
En caminos caminados
Donde supiste llenar 
De realidades lo soñado:
 
Reinventaste los bosques, las guayabas
Los peces, las granadas
El tul, tu casa, tus camadas
 
Y en tu paso 
Sabio milenario
Caminaste a la sombra –sol de tus Ksxa`w, los mayores
 
Mas hoy tu cuerpo silenciado
Por esta guerra
que ha muchos ha llevado 
De regreso a tu madre,
nuestra también, la tierra 
Te vas en espíritu 
Con tambores, flautas, y pájaros 
Saludando
Con tambores, flautas, y pájaros 
Cantando
 
Usted es el colibrí
El condor es la guerra
Porque de verde esmeralda
Se visten las montañas,  
Las guayabas, las granadas
 
Y más frutos habrá en el tul, 
su casa y las camadas
porque es semilla fértil la que hoy ha sido regada
en la tierra mujer
por su cuerpo armonizada
por su palabra siempre labrada.
 
Saludo de armonía y de dolor por la partida de nuestro hermano y amigo Salatiel Mendez,  quien en el recuerdo de lo compartido me ha inspirado esta letras que les comparto desde el Corazón.
 
Por: Sara Eva Cuellar Calderón
 
Imagen: Mural de la Escuela de la vereda El Carpintero del resguardo de Huellas – Caloto