Sin un respeto integral a la vida y autonomía de los pueblos indígenas no habrá paz. El Observatorio por la Autonomía y Derechos de los Pueblos Indígenas en Colombia -Observatorio ADPI con sede en Barcelona, Catalunya- quiere expresar públicamente su profunda preocupación e indignación debido a los hechos de violencia que atentan una vez más contra la vida, la integridad física y cultural y la autonomía de los Pueblos indígenas en Colombia, a quienes expresamos nuestro sincero apoyo y solidaridad en estos momentos.

 
En menos de dos semanas, hemos sido informados/as del asesinato de cuatro hermanos/as indígenas en los departamentos de Cauca, Valle del Cauca y Nariño. La información difundida por las organizaciones indígenas ha denunciado que:
 
– Dos indígenas Awá asesinados: El viernes 22 de marzo los/as compañeros/as María Adalgisa Canticus y Julio Cortes de 45 años de edad, fueron desaparecidos en extrañas circunstancias. El 26 de marzo una comisión de la guardia indígena Awá encontró los cuerpos sin vida; Julio Cortes fue hallado con un impacto de bala, mientras María Adalgisa Canticus recibió una herida letal de arma blanca a la altura del cuello. Los cuerpos fueron encontrados en limites del resguardo Watsalpí y PipaltaPalvíYaguapí en inmediaciones del corregimiento de Cruces vía a Barbacoas, en el departamento de Nariño al sur de Colombia, según informa la UNIPA
 
– Asesinado indígena embera chamí: El mismo 22 de marzo, a unos 30 metros del casco urbano del Municipio de Trujillo Valle, el Señor Daniel Niaza Gonzalez, de 32 años de edad fue sorprendido a las 7 p.m. por dos personas encapuchados anónimos que se transportaban en una motocicleta de alto cilindraje, recibiendo 4 impactos de bala en su cabeza y su cuerpo, cuando se dirigía de regreso a su resguardo después de haber bajado al Municipio a vender su producto, para el sostenimiento de su familia. Este crimen ha sido cometido por el grupos paramilitares que operan en la zona, según denuncia la Autoridad Tradicional del Pueblo Emebera Chamí del Valle del Cauca y la organización regional ORIVAC.
 
– Otro indígena asesinado en Caldono: El 30 de marzo, integrantes del Ejército Nacional que operan en la vereda la Esmeralda, ocasionaron la muerte de Álvaro Chocue Ramos comunero indígena del Resguardo de San Lorenzo de Caldono de 50 años de edad, por impactos de tiros de fusil en el cráneo. El Ejército Nacional ha venido realizando actos violentos de detención arbitraria, abuso de autoridad, maltrato, estigmatización y agresión física, y asesinatos a comuneros indígenas en varias veredas pertenecientes a los resguardos y territorios indígenas. Esta situación ha sido denunciada por La Plana mayor del Cabildo San Lorenzo de Caldono Cauca Territorio Ancestral Sat Tama Kiwe.
 
Desde el Observatorio ADPI condenamos estos graves hechos, que ponen en riesgo, una vez más, a los pueblos indígenas al ser objeto de violaciones a los derechos humanos y colectivos de manera sistemática por parte de los actores armados legales e ilegales. Nos unimos a los llamados que exigen que cesen inmediatamente las agresiones contra los pueblos indígenas. Además, exigimos al gobierno colombiano el cese inmediato de los atentados contra la vida de los y las indígenas, el cumplimiento de sus obligaciones, el fin de las estructuras paramilitares, y el acatamiento urgente de los Tratados internacionales y sentencias de la Corte Constitucional en materia de protección a los pueblos indígenas.
 
Reiteramos nuestra preocupación porque en medio de los diálogos para finalizar el conflicto armado que se adelantan entre el gobierno y la insurgencia, se sigan produciendo hechos de este tipo que claramente atentan contra cualquier voluntad de paz real y duradera en el país. Sin un respeto integral a la vida y autonomía de los pueblos indígenas en Colombia no habrá paz.
 
Invitamos a nuestras amigas y amigos de Catalunya, del Estado español y la comunidad internacional a que conozcan y hagan seguimiento a esta situación. A que hagamos llegar nuestras voces a las autoridades de Colombia y exijamos que se respeten a los pueblos indígenas y sus organizaciones, que día a día demuestran un ejemplo de dignidad en sus procesos de resistencia, defensa de la vida, el territorio y la paz.
 
Barcelona, 05 de abril de 2013