Desde hace muchos años la guerrilla de las FARC-EP, han promovido un plan sistemático de exterminio físico y cultural del movimiento indígena colombiano. En el marco de esta política, las FARC han implementado diferentes estrategias para lograr su objetivo.

 

LA ASAMBLEA DE LAS COMUNIDADES INDÍGENAS DEL NORTE DEL CAUCA, CONDENAN A LOS IDEÓLOGOS DE GUERRA DE LAS FARC ANTE LA OPINIÓN NACIONAL E INTERNACIONAL
 
Desde hace muchos años la guerrilla de las FARC-EP, han promovido un plan sistemático de exterminio físico y cultural del movimiento indígena colombiano. En el marco de esta política, las FARC han implementado diferentes estrategias para lograr su objetivo. Como les ha sido difícil confrontar al movimiento indígena con la palabra y el argumento, empezaron a utilizar a miembros de las comunidades para que cumplan con sus propósitos militaristas “revolucionarios”. 
 
Preparan política y militarmente a sus unidades para enfrentar al movimiento indígena, generando y auspiciando al interior de las comunidades, grupos organizados denominados AVELINOS, RESERVAS CAMPESINAS, entre otros. Los cuales tiene como único fin el dominio territorial, ideológico, político y hegemónico para obstruir el desarrollo de nuestras organizaciones propias. Otra de las estrategias de estas organizaciones PARA GUERRILLERAS ha sido la económica, aprovechándose de la necesidad de las comunidades y comprando conciencia a los comuneros, ofreciendo préstamos e impulsando proyectos productivos que buscan romper la estructura de los cabidos indígenas.
 
Desde hace más de una década, uno de sus ideólogos, político y militares, alias MATIAS, mediante un documento visibilizó el plan de las FARC. Un plan de exterminio sistemático, físico y cultural. “Cualquier pretexto de organización es necesario para lograr la revolución”, este es un argumento “bajo”, que crea desordenes en las comunidades indígenas y así querer lograr supuestos cambios estructurales. Por eso hoy en las comunidades son los milicianos los mayores impulsadores del desorden en torno a la autoridad tradicional. Insistiendo como parte de la política de las FARC. Han entrenado a nuestros propios comuneros y los han convertido en sicarios de las comunidades y de las muertes selectivas, asesinatos preconcebidos y con el aval de los ideólogos de la guerra fariana. Ha sido una estrategia militar de esta autodenominada organización “revolucionaria”, quien dentro del marco de su estrategia militar han asesinado a la esencia del movimiento indígena, nuestros The Walas – médicos tradicionales, igualmente dan golpes sicariales a líderes comunitarios que defienden nuestra organización. Pretende las FARC dentro de su plan de exterminio, miedo y terror destruir a las comunidades indígenas.
 
Para nosotros la guerra que nos ha declaro las FARC, nace a partir de la lucha por la pervivencia, autonomía territorial y gobierno propio que estamos construyendo de acuerdo a los mandatos comunitarios. Esto genera en las FARC un problema grave que les impide ordenar y mandar en nuestra comunidad. El movimiento indígena en el marco de la resistencia representado por la comunidad generó en cada comunero identidad, respeto y autoridad a lo propio que choca con el querer de las FARC, quienes en algún momento histórico pretendieron manipular nuestra organización comunitaria. Al ver su derrota político en nuestras comunidades ellos pretenden exterminar al movimiento indígena colombiano de forma política y militarmente. Por la misma fuerza de la comunidad, de la conciencia y el fortalecimiento de la resistencia del proceso organizativo, se ha logrado enfrentar al modelo y a sus diferentes expresiones para militares y geopolíticas estatales que apuntan a la destrucción de la autonomía del movimiento indígena. 
 
Hoy vemos con preocupación acciones que desequilibran la armonía territorial y la convivencia de las comunidades; en una forma impositiva y bajo poderes económicos esta organización subversiva viene comprando tierras en nuestros resguardos y entregándosela a personas ajenas a nuestra organización. Después de un tiempo esas nuevas personas que llegan al Resguardo son quienes se convierten en los impulsadores de la estrategia guerrillera de acabar con nuestra organización. 
 
Igualmente han utilizado bajo la promesa de incentivos juveniles: celulares, plata y armas como opción de incentivo para que nuestros jóvenes entren a formar parte de la organización guerrillera. Las escuelas de formación de las FARC, se dictan con promesas diferentes a libre participación, buscan permear al movimiento indígena e invitan a la comunidad bajo promesas de regalos para aprovechar y dictar sus famosas charlas en contra del movimiento indígena. Y por último y más peligroso es el intento de copar a nuestras organizaciones propias, ordenando a sus cuadros la participación efectiva como miembros e infiltrarse en las instituciones propias.
 
Ya como política de desinformación fuera de nuestros territorios hemos observado como sus organizaciones políticas proclives al movimiento subversivo, han establecido estrategias de desprestigio en contra del movimiento indígena, generando en los organismos internacionales un ambiente de desinformación y de exterminio para acabar con nuestro proceso organizativo. Sus asesores en cada reunión y oportunidad que tienen se dedican a falacear la organización indígena. La otra lucha que tenía esta organización en contra del gobierno colombiano y de las políticas estatales, ha pasado a un segundo plano y somos nosotros su objetivo primario para exterminarnos a cualquier precio. Nuestra organización ha dialogado con la insurgencia planteándoles las preocupaciones que hoy expresamos con respeto en la palabra, la respuesta de parte de las FARC ha sido con la mentira y los asesinatos a nuestros comuneros y comuneras, entre ellos los médicos tradicionales.
 
La comunidad indígena reunida en el Resguardo de San Francisco ha condenado a seis comuneros por los delitos de asesinato, pero con certeza y contundencia condenamos a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia FARC, ejército del pueblo (EP), como los autores intelectuales quienes dentro de su plan militar han asesinado selectivamente a los comuneros indígenas, en el marco de su plan de exterminio a el movimiento indígena colombiano.
 
AUTORIDADES INDÍGENAS DEL CONSEJO REGIONAL INDÍGENA DEL CAUCA – CRIC, ASOCIACIÓN DE CABILDOS INDÍGENAS DEL NORTE DEL CAUCA – ACIN – CXHAB WALA KIWE, ORGANIZACIÓN NACIONAL INDÍGENA DE COLOMBIA – ONIC.
 
Toribio Cauca, abril 29 de 2013.
 
“Cuenten con nosotros para la PAZ nunca para la GUERRA”