La derrota del neoliberalismo provocada por la fuerza de la movilización del movimiento indígena y popular, realzó las esperanzas de los ecuatorianos y ecuatorianas por un proceso de cambios estructurales que ponga fin a siglos de explotación y opresión económica, política y cultural; esos anhelos han sido progresivamente burlados y traicionados por Revolución Ciudadana.

 

 

A la sociedad ecuatoriana
A las organizaciones sociales
A la opinión pública nacional e internacional

La derrota del neoliberalismo provocada por la fuerza de la movilización del movimiento indígena y popular, realzó las esperanzas de los ecuatorianos y ecuatorianas por un proceso de cambios estructurales que ponga fin a siglos de explotación y opresión económica, política y cultural; esos anhelos han sido progresivamente burlados y traicionados por Revolución Ciudadana. La Consulta Popular convocada por el Presidente de la República, Eco. Rafael Correa, es una de esas graves traiciones a la confianza del pueblo ecuatoriano; ante lo cual, la Confederación Kichwa del Ecuador ECUARUNARI manifiesta:

* Que, por nuestro firme compromiso con la democracia reconocemos la legitimidad de la Consulta Popular como instrumento de expresión de la soberanía popular y la vía más adecuada para la participación democrática.

* Nuestro rechazo a las preguntas de la Consulta Popular, por ser inconstitucional. Mediante enmiendas constitucionales (Art. 441 de la Constitución) no se puede alterar la estructura fundamental del o de los artículos a ser enmendados, tampoco puede modificar el carácter y elementos constitutivos del Estado, ni establecer restricciones a los derechos y garantías. Las otras preguntas ya constan, y de manera más amplia, en la Constitución, por lo que bastaría, si hubiera voluntad política real del gobierno para impulsar estos cambios, “cumplir y hacer cumplir” la Carta Magna. En consecuencia, y por el carácter de la pregunta y las circunstancias políticas de la convocatoria, se advierte que las reales intenciones no son las de “escuchar la voluntad de los mandantes”, sino distraer la atención del pueblo ecuatoriano y acumular poder para reprimir a quienes critiquen al gobierno, especialmente a las organizaciones indígenas, sociales y populares.

* Rechazamos las preguntas de la Consulta Popular por ser irrelevantes y demagógicas. La violencia es expresión de las condiciones sociales y económicas, de la inadecuada e ineficiencia de las estructuras y modelo de administración de justicia, por lo tanto, el aumento de las penas y los simples cambios administrativos no son más que obedecer a las propuestas más reaccionarias y antidemocráticas de los sectores de la vieja derecha, lo que le hace a las Consulta Popular un engaño a los ecuatorianos, particularmente con las víctimas.

* Si la Consulta Popular quisiera profundizar la democracia y promover los cambios estructurales que el país necesita debiera preguntar a los ecuatorianos y ecuatorianas: Si estamos de acuerdo o no impulsar una Revolución Agraria, que redistribuya las tierras eliminando progresivamente su concentración.  Qué desprivatice el agua y construya un modelo económico basado en la soberanía alimentaria y el sumak kawsay.  Qué si estamos de acuerdo o no con la protección del Yasuni-ITT.  Qué si queremos o no firmar una Tratado de Libre Comercio TLC con Europa, entre otras preguntas fundamentales.

Consientes de la necesidad de una amplia participación social y una fuerte movilización que retome el proceso de transformaciones necesarias para salir del modelo extractivista y construir el Sumak Kawsay, convocamos a todos los sectores organizados o no a formar un gran frente social en defensa de la Democracia y la Plurinacionalidad.

 

http://www.ecuarunariec.org/noticias/1-notis/223-ecuarunari-las-preguntas-de-la-consulta-popular-es-una-traicion-al-pueblo-ecuatoriano