Memoria Y Camino del Tejido de Comunicación

Cauca: Una colcha de retazos de vida

Nuevamente ensordecieron a los pobladores del centro del poblado de Tacueyó el día 20 de agosto del presente año.

Alrededor de unas 120 personas de todas las edades, hicieron acompañamiento a las madres y padres de los adolecentes y jóvenes caídos en el bombardeo del pasado mes de marzo en la Vereda Gargantilla del Resguardo Indígena de Tacueyó.

Esta vez no los ensordecieron las balas, ni las bombas, ni los aviones de las fuerzas armadas de Colombia y ni de ningún actor armado. Esta vez los ensordecieron las voces de los niños, estudiantes de la Escuela de la Vereda La Tolda, acompañados con la música de viento del Colegio Quintín Lame, con títeres, pancartas y muchos niños montados a caballo de madera recorrieron las principales calles de esta localidad. Los niños exigieron que no haya más guerra y bombas en los territorios indígenas porque ha causado mucha sangre y ha cobrado muchas vidas inocentes.

Para esta actividad de memoria colectiva, cada niño y cada participante escribieron los nombres de las víctimas caídos en este conflicto armado. Así también lo hizo la madre de Gustavo Pilcue (niño muerto en el bombardeo de Gargantillas), con su rostro triste y sus ojos llenos de lágrimas, encabezo la fila ya no con su hijo cogido de la mano como lo hacía en estas calles mientras lo veía crecer, esta vez salió con una colcha donde aparecía el nombre de su hijo porque ahora sólo existe en la memoria de ella y de sus compañeros de clase, esta colcha de retazos representa a todos los que han muerto en esta guerra.

Frente a estas acciones de violencia, los niños se expresaron con el arte porque es una forma de sentirse libres. En este ejercicio una niña dibujó una mariposa que reflejó el cómo la mariposa hace su recorrido, conoce y aprende, mostró su imagen con mucho orgullo.

Después de 5 meses las madres siguen llorando a sus muertos, esto no solamente sucede en Tacueyó sino en toda Colombia. Estas personas exigen justicia y que haya más inversión social para que los jóvenes no se metan a los grupos armados.

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